QUIEBRAS Y OTRAS QUIEBRAS
Salvarse de la quiebra no es un asunto de un decreto, cuanto más de la aplicación de un programa de reconversión de pasivos y nuevos plazos para cumplir con su calendario de pagos. Si principalmente los bancos están dis- puestos a estos procesos, deberían considerar cuando el Estado mediante decretos, inyectó dinero para el rescate de sus quiebras, las cuales dejaron escuálida a nuestra economía.