En el contexto actual de desaceleración económica, cortes recurrentes de energía y una notable reducción del flujo de efectivo, las empresas en Ecuador enfrentan desafíos significativos para mantenerse operativas. En este escenario, la correcta planificación y gestión tributaria se convierte en una herramienta estratégica indispensable para preservar la liquidez y asegurar la sostenibilidad de las organizaciones dentro del marco de la Ley. Una de las opciones que puede marcar la diferencia es la solicitud de devolución de impuestos, específicamente Impuesto a la Renta y las retenciones de IVA. Sin embargo, este proceso no debe ser visto como un simple trámite administrativo, sino como una oportunidad para optimizar las finanzas de las empresas mediante la revisión exhaustiva de las declaraciones presentadas en años anteriores y el ajuste de las mismas de conformidad a las resoluciones emitidas por la autoridad tributaria. Es aquí donde cobra relevancia el papel de los asesores tributarios. Contar con profesionales especializados permite identificar errores o excesos en las declaraciones de impuestos pasados, detectando créditos tributarios no aplicados o deducciones omitidas por desconocimiento. La normativa ecuatoriana ofrece diversas figuras para la devolución de saldos a favor de los contribuyentes, siempre y cuando se cumpla con los requisitos formales establecidos por el Servicio de Rentas Internas (SRI). La Devolución del IVA y del Impuesto a la Renta: Un Respiro Necesario En el caso del IVA, los contribuyentes que han realizado retenciones en exceso o cuyos productos y servicios califican para devolución pueden obtener un alivio financiero al recuperar estos montos. Por otro lado, la devolución del Impuesto a la Renta aplica para quienes, tras una revisión técnica de sus declaraciones, encuentran que pagaron en exceso o tienen saldos a favor que no han sido compensados. La Asistencia Especializada: Clave para la Eficiencia Dado el nivel de complejidad que involucra el proceso de solicitud de devoluciones, es fundamental actuar de manera ordenada y profesional. La asesoría especializada no solo minimiza riesgos frente a posibles sanciones por errores formales, sino que acelera el proceso de devolución al garantizar la correcta preparación y presentación de la documentación requerida. En definitiva, en tiempos de incertidumbre económica como los actuales, maximizar la eficiencia tributaria es una necesidad imperiosa. La recuperación de impuestos a través de los mecanismos legales existentes puede convertirse en un factor clave para enfrentar la coyuntura y asegurar la sostenibilidad del negocio. Contribuyentes no deben postergar la posibilidad de revisar sus declaraciones. No es solo una solución inmediata, la correcta planificación tributaria fortalece la estructura financiera y abre camino hacia una gestión más eficiente en el largo plazo.