EL REGLAMENTO A LA LEY DE COMUNICACIÓN
Más que una conspiración, es una cortina de ruido, producto de la prisa y la codicia, que no deja que la ciudadanía se concentre en lo importante. Los vicios de la comunicación no se remedian con controles burocráticos, imposibles de implementar equitativamente con la tecnología de hoy; esa receta ya se aplicó, destruyó el orden, el respeto y la decencia, y arrasó con medios de comunicación y periodistas.