Una inusual y masiva acumulación de espuma marina cubrió la costa de Loughshinny, en el norte del condado de Dublín, Irlanda, dejando asombrados a los residentes locales. El fenómeno se produjo tras un episodio de fuertes vientos y lluvias intensas, condiciones que propiciaron la inmensa acumulación de burbujas junto a la línea de costa.
Aunque la aparición de espuma marina resulta un fenómeno relativamente común, la magnitud de la acumulación en esta ocasión ha sido descrita como «colosal» e inusual por quienes viven en la zona.
Un residente local, que lleva 50 años viviendo en Loughshinny, aseguró que nunca antes había presenciado tal cantidad de espuma cubriendo el paisaje, llegando incluso a las calles y aceras cercanas. La razón de esta espuma no es química ni artificial, sino un fenómeno natural.
Se forma por la agitación intensa del agua del mar, especialmente cuando esta contiene altas concentraciones de materia orgánica disuelta. Restos de algas, microorganismos y proteínas actúan como agentes tensioactivos, similar al jabón.
