INÉDITA ALERTA POR LA CÉDULA
La cédula de identidad es el principal documento de un ecuatoriano. Algunos lo obtienen a pocos días de su nacimiento y su número es para toda la vida. Es la evidencia de pertenencia al país, de su pasado, presente y futuro. En esa credencial, además de la foto, el nombre completo y la fecha de nacimiento, constan los nombres de los padres, estudios, el estado civil actual. El código y huellas dactilares. Nivel de estudios. Firma. Y la presentamos, incluso, en el momento de mayor felicidad personal o familiar, como la compra de un bien, una casa, un carro, un terreno. Ingresar a un edificio u oficina pública, al metro. Pero, la Superintendencia de Protección de Datos Personales dio una alerta inédita. La mayoría de esa información debería ser eliminada de la cédula de identidad. De hecho, únicamente sirven la foto, el nombre y la fecha de nacimiento. Todo lo demás no solo es innecesario, sino que puede significar un riesgo para el ciudadano ya que contiene datos biométricos, que, en este tiempo, son valiosos para criminales. La Ley del Registro Civil dispone los datos que están en ese documento. Pero esto, con apoyo de la Superintendencia, puede cambiar. Los datos de cada ecuatoriano ya permanecen en bases de datos a las que acceden varias instituciones públicas que necesitan, eventualmente, revisar todos los antecedentes de una persona. Debe mantenerse el propósito de una cédula, que es la identificación, pero no dar facilidades para obtener, incluso, la huella digital. En Europa y EE.UU. es más relevante el color de ojos y la altura. El proceso para un cambio debe iniciar.