Los moradores del barrio Santa Fe han expresado su preocupación por los recurrentes problemas relacionados con el suministro de agua potable en la zona. Por semanas, han enfrentado la falta de agua en sus hogares, a pesar de recibir facturas mensuales por el servicio. Cuando finalmente llega el agua, denuncian que está turbia y no apta para el consumo, obligándolos a adquirir bidones de agua para suplir sus necesidades. Sin embargo, esta semana han recibido el servicio sin problema alguno.
Además, los habitantes señalan el lamentable estado de las calles en el barrio. Durante la temporada de lluvias, las vías se convierten en lodazales, llenas de baches que dificultan la circulación peatonal y vehicular. Los residentes afirman que los continuos huecos en las calles representan un peligro para la seguridad de quienes transitan por la zona.
Un morador informó haber pasado tres semanas sin agua antes de que el suministro fuera restablecido recientemente. Mientras tanto, otro vecino destacó la falta de aceras terminadas en el barrio, lo que genera acumulación de lodo durante las lluvias y aumenta el riesgo de enfermedades transmitidas por mosquitos.
Asimismo, los residentes señalan que los trabajos de mejora en la zona han sido deficientes e inconclusos, dejando evidentes huecos y obstáculos en las vías públicas. Hacen un llamado a las autoridades locales, solicitando una pronta respuesta y acciones efectivas para abordar estos problemas que afectan la calidad de vida de la comunidad.
Ante la falta de soluciones oficiales, algunos vecinos han utilizado recursos propios para intentar mejorar ciertas secciones de aceras en el barrio. Sin embargo, han advertido sobre incidentes de personas que han sufrido caídas debido al mal estado de las aceras, instando a una pronta intervención municipal para evitar más accidentes.
