USO Y ABUSO DE LA VIOLENCIA POLÍTICA DE GÉNERO
La violencia de género en contra de las mujeres, en cualquier escenario o tema, es algo tan serio que resulta grave que muchas políticas y funcionarias públicas estén abusando del concepto, específicamente, de violencia política de género, para protegerse del escrutinio público. Desde que se aprobó la ley de elecciones, indebidamente llamada Código de la Democracia, donde se establece a la violencia política de género como delito, muchas funcionarias públicas e incluso políticas con aspiraciones electorales han recurrido a ese cuerpo legal al verse perjudicadas por opiniones críticas que provienen de periodistas o de otros políticos que, asimismo, critican su trabajo. Este recurso se ha convertido en un grave obstáculo para el escrutinio público, clave para el desarrollo y consolidación de una democracia, donde funcionarios y mandatarios tienen la obligación de ser tolerantes con la crítica que se les hace. En otras palabras, se está utilizando ese Código de la Democracia como mecanismo para neutralizar las críticas. Y además, se está tergiversando la esencia del tipo penal, la cual dice que lo que está mal es hacer estereotipos femeninos para marginar a las mujeres de la actividad política. Ahora resulta que en muchas ocasiones se denuncian presuntos actos de violencia política de género cuando podrían ser críticas hechas por igual a hombres y mujeres.
