Las inundaciones y corrimientos de tierra provocados por las intensas lluvias que han golpeado Corea del Sur desde hace una semana, han provocado ya 37 muertos y se prevé que la cifra pueda aumentar debido a la inundación de un túnel en el centro del país donde quedaron atrapados una quincena de vehículos.
Según los datos más recientes del Mando de Desastres y Contramedidas de Emergencia, 10 personas permanecen desaparecidas y más de 6.000 están en refugios de evacuación en distintos puntos del país, con medio millar de militares participando en las labores de búsqueda y asistencia.
Las zonas más golpeadas son el centro y el sur del país, áreas donde se han registrado un 30 y un 40 % más de precipitaciones, respectivamente, con respecto a la media de los últimos años desde que comenzó la temporada monzónica hace tres semanas. La provincia de Gyeongsang del Norte (sureste) suma por sí sola 17 fallecidos, la mayoría a consecuencia de los corrimientos de tierra, y 9 desaparecidos.
En la ciudad de Cheongju, unos 100 kilómetros al sur de la capital surcoreana, la crecida de un río aledaño provocó el sábado 15 de julio la súbita inundación de un túnel que dejó atrapados a unos quince vehículos en su interior.