El Ministerio de Salud Pública (MSP) no ha confirmado ni desmentido muertes por tuberculosis en la Penitenciaría del Litoral. Este viernes 7 de marzo, cinco internos fueron encontrados sin vida en el centro penitenciario, y un informe policial señaló que la tuberculosis podría ser la causa probable de los decesos.
Fernando Bastias, del Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (CDH) de Guayaquil, confirmó que hubo cinco muertos en el centro de privación de libertad. En este sentido, Édgar Lama, ministro de salud, destacó que las personas privadas de su libertad (PPL) han sido atendidas médicamente en todos sus requerimientos, señalando que, aunque el médico prescribe los tratamientos es decisión del interno aceptarlos o rechazarlos.Durante una entrevista radial para FM Mundo, Lama dijo que esa cartera de Estado ha provisto el tratamiento en las cárceles; sin embargo, existen presos que se han rehusado a tomar el tratamiento, lo que hace que la bacteria sea resistente.
Acerca del fallecimiento de cinco personas, expresó que todavía no están los informes de autopsias que determinen que la tuberculosis fue la causa, manifestó que hay muchas personas que sufren de tuberculosis y tienen otras clases de enfermedades subyacentes que las hacen particularmente vulnerables, como VIH u otros tipo de inmunodepresión.
Lama mencionó que una epidemia en Guayaquil no sería algo que pudiese ocurrir fácilmente. Agregó que se les ha entregado el medicamento a las PPL y, en caso de que en determinadas circunstancias haya un agravamiento, se las ha recluido en pabellones de aislamiento. Sostuvo que no hay vacunas y que el tratamiento es estandarizado, hay pabellones de aislamiento para que las personas puedan recuperarse sin contagiar y no es una enfermedad que preocupe a la salud pública en este momento.
Aunque el Ministerio de Salud ha tomado medidas para tratar la tuberculosis en las cárceles, los desafíos continúan, especialmente debido a la resistencia de algunos internos a recibir el tratamiento, a pesar de esto, las autoridades aseguran que la situación está bajo control y no representa una amenaza inmediata para la salud pública, sin embargo, el pedido del Comité de Derechos Humanos de Guayaquil resalta la preocupación por la situación en las cárceles, y será crucial seguir de cerca los informes de autopsias y las acciones preventivas para evitar futuros brotes.