En su primer día completo de gestión, el nuevo presidente de Perú, José Jerí, encabezó personalmente un operativo de requisas simultáneas en cuatro cárceles del país este sábado 11 de octubre, declarando una «guerra» frontal contra el crimen organizado. La acción busca desmantelar las redes de extorsión y sicariato que operan desde el superpoblado sistema penitenciario.
«Por disposición del presidente se ha hecho una requisa extraordinaria para poder combatir la delincuencia», declaró a la prensa el jefe del Instituto Nacional Penitenciario (Inpe), Iván Paredes. En el operativo participaron 200 agentes junto a altos mandos policiales.
¿CUÁLES FUERON LAS PRIMERAS MEDIDAS DE JERÍ? La ofensiva contra la criminalidad fue la prioridad absoluta del mandatario desde que juramentó en la madrugada del viernes. La primera materialización de su promesa —»El principal enemigo está afuera, en las calles, las bandas criminales, y como enemigos debemos declararle la guerra»— fueron los operativos en los penales.