Las fuertes lluvias en la Amazonía no solo provocaron crecidas de ríos, tramos de tierra y afectaciones a viviendas y caminos; también pusieron en riesgo la generación y abastecimiento de energía eléctrica a escala nacional.
El 2 de junio, el Operador Nacional de Electricidad (Cenace) informó sobre un incremento en la intensidad de las precipitaciones en la región, que provocó la salida de operaciones de algunas centrales hidroeléctricas:
- Coca Codo Sinclair
- Delsitanisagua
- San Bartolo
La suspensión responde a la “mala calidad del agua”. La lluvia arrastra rocas, troncos, animales y otros desechos que ponen en peligro el estado de las turbinas.
Cenace pide a privados encender sus generadores
En un oficio conocido el 2 de julio, Cenace expone que las condiciones meteorológicas comprometen las reservas de potencia requeridas para garantizar el abastecimiento eléctrico en las horas de mayor demanda.