Desde los 13 años, don Gabriel ha dedicado su vida al oficio del calzado, iniciándose en el mercado central junto a don Navas, su primer maestro. Hoy, con más de 22 años de experiencia, su zapatería en los kioskos de El Palmar se ha convertido en símbolo de esfuerzo y tradición.
Se independizó a los 20 años y ahora produce entre 15 y 20 zapatos diarios, con materiales traídos desde Ambato y arreglos desde los $0,50 centavos; la atención al público es de lunes a sábado de 9 a.m. a 6 p.m., siempre con sus permisos municipales al día. Desde la apertura del nuevo terminal, sus ventas han crecido, permitiéndole dar trabajo a un ayudante desde hace dos años; es especialista en botas y pupos aunque son los más difíciles de reparar. Don Gabriel representa a los mantenses que, con trabajo constante y pasión por lo que hacen, salen adelante día a día.