Playas, santuarios y pueblos con tradición religiosa se llenan en Semana Santa. En Ecuador, los lugares más visitados durante el feriado combinan fe, comida típica y descanso. Según datos del Ministerio de Turismo, en años anteriores más de 1,2 millones de personas se movilizaron durante estos días, y las cifras suelen repetirse. Entre los destinos favoritos están las playas de Manabí y Santa Elena, Manta, Crucita, Montañita y Salinas reciben miles de turistas que buscan sol, mar y fanesca.
En contraste, otros optan por lo espiritual y viajan hacia El Quinche, Baños de Agua Santa, Loja o la Basílica del Voto Nacional en Quito. Las iglesias se llenan, y las calles también. Cuenca y Riobamba también son elegidas por quienes prefieren pasear sin alejarse mucho del centro del país. En todos estos sitios, el comercio informal florece: choclos cocinados, agua embotellada, velas y hasta estampas religiosas se venden en cada esquina. El feriado mueve turismo, pero también reactiva la economía de miles de familias.