Darío (nombre protegido) imaginó que nunca volvería a ver a su familia. El trabajador de una empresa de telecomunicaciones, junto con otros dos compañeros, fue secuestrado la mañana de ayer cuando acudieron al sector Peñón del Río, en Durán, para realizar un trabajo. “Nos hicieron llegar hasta este lugar.
Al llegar, nos interceptaron, nos llevaron a otro sitio, nos contactaron por teléfono, todo fue planeado. Pedían 2.000 dólares por cada uno. A uno de mis compañeros le golpearon la cabeza con el teléfono y a otro, con una cachetada. A mí me tenían en un rincón pidiéndome datos. Pensé que nos iban a matar, vi la muerte de cerca”, relató Darío.
Darío se quiebra al relatar las casi dos horas que pasó secuestrado junto a sus compañeros, por tres sujetos que los interceptaron, apuntaron y amenazaron con matarlos si sus familiares o jefes no pagaban la cantidad de dinero exigida. “Me hacían preguntas. Utilizaron el carro en el que íbamos para llevarnos hasta la casa donde nos mantuvieron retenidos. Otro de ellos nos seguía en una moto. Habíamos ido por otros trabajos, pero no tan lejos. Fue una estrategia. El cliente era cómplice; él vio todo y no hizo nada. No sé si volvería a Durán por un trabajo, es nuestra vida. Nosotros fuimos por una instalación de Internet”, agregó aún asustado.
Darío y sus compañeros, al ver que la policía llegó para rescatarlos, salieron corriendo y se metieron al río. El teniente coronel Santiago Gavilanes, jefe del distrito Durán, informó que este no es el primer caso de características similares registrado en este cantón del Guayas en los últimos tres días.
“Es la segunda liberación. Es una nueva forma de operar de parte de la delincuencia: llaman para recibir atención en el momento en que los trabajadores llegan al lugar, son secuestrados. Pedimos a las empresas que implementen protocolos de seguridad y nos avisen sobre la ubicación de sus trabajadores”, indicó el oficial. (AEB)