Los cuatro menores de Las Malvinas fueron ejecutados con un disparo en la cabeza, según reveló el informe médico legista, entregado tres meses después del hallazgo de sus cuerpos en un manglar de Taura, en Naranjal.
El abogado del Comité Permanente de Derechos Humanos (CDH), Abraham Aguirre, señaló que el documento detalla que los disparos fueron efectuados desde atrás, lo que indica que las víctimas estaban de espaldas. Además, mencionó que, presuntamente, Josué, Ismael, Nehemías y Steven habrían estado arrodillados en el momento de su ejecución.
En declaraciones a Ecuavisa.com, Aguirre indicó que uno de los adolescentes presentaba una lesión en el lado izquierdo de la cabeza, causada por un golpe contundente. Este hallazgo coincide con el testimonio del hombre que les prestó un teléfono la noche del 8 de diciembre, quien relató haber visto a uno de ellos con rastros de sangre.
Detención y proceso judicial
El 8 de diciembre de 2024, los cuatro menores desaparecieron tras ser detenidos por militares en la avenida 25 de Julio, en el sur de Guayaquil. Los 16 uniformados involucrados fueron procesados por desaparición forzada y han intentado, en dos ocasiones, obtener su liberación mediante apelaciones a la prisión preventiva.
La noche del 16 de marzo de 2025 se llevó a cabo la reconstrucción de los hechos, una diligencia que se extendió hasta la mañana del lunes 17, concluyendo en un camino secundario de la parroquia Taura.
