El Departamento de Estado de Estados Unidos sancionó por corrupción a la expresidenta argentina Cristina Fernández, quien no podrá entrar a los Estados Unidos, al suspenderse de manera indefinida su visado. La sanción se extiende a sus dos hijos, Maximiliano y Florencia, y al exministro de Planificación, Julio Miguel De Vido. El anuncio fue firmado por Marco Rubio, jefe de la diplomacia estadounidense, en la que apuntó a Fernández por “participación en corrupción significativa durante su tiempo en el cargo público”.
Según el comunicado del Gobierno estadounidense, tanto Fernández como De Vido “abusaron de sus posiciones al orquestar y beneficiarse financieramente de múltiples esquemas de soborno relacionados con contratos de obras públicas, resultando en millones de dólares robados al gobierno argentino”. Javier Milei, presidente de Argentina, celebró la decisión del Departamento de Estado con un mensaje irónico dirigido a la exmandataria. “Che, Cristina. Fin”, publicó Milei.
