ALIADOS PELIGROSOS
La asesoría en seguridad que el Gobierno central negocia con una entidad privada internacional no deja de causar preocupación en la sociedad civil, más aún si no existe información clara sobre lo que se pretende contratar y cuáles son los términos de las conversaciones iniciadas con este propósito. El encuentro entre el presidente de la República y el fundador de una empresa de mercenarios inquieta debido a sus antecedentes a nivel mundial, que podrían resultar contraproducentes en la actual situación de inseguridad y violencia criminal que desangra al país y que empobrece a la población. Ecuador ha recibido en múltiples ocasiones asistencia en materia de seguridad de los gobiernos de Estados Unidos, Colombia e Israel, entre otros, pero hasta ahora no han existido alianzas estratégicas para la asistencia de cuerpos de seguridad formados por mercenarios. El gobierno central no puede olvidar que Ecuador suscribió la Convención Internacional contra el Reclutamiento, la Utilización, la Financiación y el Entrenamiento de Mercenarios. Hace veinte años, el país ya fue investigado por un grupo de trabajo de la ONU tras denuncias sobre la existencia de este tipo de compañías en el territorio nacional, las cuales formaban personal para esta clase de actividades.