EL DESTINO DE USAID Y SUS EFECTOS EN EL PAÍS
Aunque aún no se puede medir con exactitud cuáles serán los efectos del congelamiento de la cooperación que Estados Unidos mantenía con Ecuador, no debería sorprender que en el futuro estos sean muy perjudiciales para el país, sobre todo en temas de seguridad, salud, educación y gobernanza. El congelamiento de las actividades de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, Usaid, significa que los $ 250 millones que estaban destinados a proyectos en Ecuador se interrumpirían. En consecuencia, también se vería afectada la red de proveedores, contratistas y consultores que trabajaban en esas iniciativas. Es muy probable que esos proyectos que se financiaban con fondos de Usaid se suspendan, dado que la nueva administración de EE.UU. ha sido particularmente crítica con el envío de esos recursos. Lo lamentable es que más de la mitad de ellos se asignaban a proyectos de paz y seguridad, lo que implica que muchas iniciativas para fortalecer a las fuerzas del orden desaparecerían, así como los acuerdos de cooperación con el sistema Judicial y Fiscalía, y programas de asistencia humanitaria. En caso de que así suceda, el Estado y la sociedad civil no pueden cerrar los ojos ante esta necesidad y deberán buscar los medios para que las iniciativas que se vean perjudicadas puedan asegurar su sostenibilidad y permanencia