En el mundo, 670 millones de personas estuvieron contagiadas de coronavirus tras el surgimiento de la pandemia en 2020. Cinco años después, uno de cada diez de estos pacientes desarrollaron el denominado covid prolongado o persistente, que afecta a varios órganos del cuerpo. En Ecuador, no hay cifras oficiales de cuántas personas han sido diagnosticadas con covid prolongado.
También son escasos y muy locales los estudios de los efectos y síntomas que dejó el covid a largo plazo. Pero neumólogos, como Fernando Salazar, confirman que a sus consultas siguen llegando enfermos con esta afección. El Long Covid genera daños multisistémicos, según un estudio realizado en 2023 en la revista científica The Lancet.
Por ejemplo, en el sistema neurológico genera problemas como: • Deterioro cognitivo • Trastornos del sueño • Pérdida de memoria • Tinnitus (zumbido o ruido en los oídos) Pero también hay secuelas en el sistema respiratorio como tos, síndrome de fatiga persistente, falta de aire o límites a la actividad normal. Según los médicos, aún no existen tratamientos comprobados para la covid prolongada.
Actualmente, se centran en formas de aliviar los síntomas o proporcionar rehabilitación. Los especialistas confirman que existe una necesidad de desarrollar estudios de largo alcance para encontrar un tratamiento para terminar con la enfermedad.