Ecuador es uno de los países con una de las mayores tasas de emprendimiento en la región, en medio de un escenario en el que las cifras de empleado adecuado no mejoran y el desempleo afecta a casi un 4% de la población económicamente activa. La tasa de actividad emprendedora temprana (TEA) en el país es de 32,65%; es decir, unos 3,3 millones de ecuatorianos estuvieron involucrados en la creación y puesta en marcha de un negocio, según el informe Global Entrepreneurship Monitor (GEM) 2023-2024, realizada para Ecuador por ESPAE, Escuela de Negocios de la ESPOL.
El informe menciona, además, que el 56,6% de los ecuatorianos encuestados ve a la actividad emprendedora como “una opción válida como carrera profesional” . Y una porción similar, el 54%, considera que “los emprendedores exitosos son respetados y tienen un estatus superior”, lo que muestra que ser emprendedor en Ecuador es un trabajo con el que la población siente satisfacción. Sin embargo, uno de los mayores desafíos para los emprendedores ecuatorianos es encontrar fuentes de financiamiento para comenzar sus negocios, para sostenerlos en épocas de crisis o para hacerlos crecer. De hecho, el informe menciona que el 21,3% de los encuestados mencionaron la falta de financiamiento como una de las causas por las que dejaron su emprendimiento.