Ante la compleja situación que atraviesa el hospital Teodoro Maldonado Carbo del IESS en Guayaquil, el Ministerio del Interior ha ordenado la intervención de un equipo de inteligencia policial con el objetivo de identificar posibles amenazas contra los servidores de la institución.
El ministro del Interior, John Reimberg, informó este jueves 27 de febrero que este equipo ingresará al hospital, ubicado en el sur de Guayaquil. Aclaró que no se llenará la institución de policías y militares, sino que se abordará el problema de otra manera, garantizando seguridad al personal administrativo y médico.
Este grupo de inteligencia acompañará a los funcionarios administrativos y trabajará en la identificación de presuntas mafias dentro del hospital. Además, revisará tanto los contratos ya adjudicados como los próximos a concretarse, con el fin de evitar presiones o amenazas dirigidas a influir en las decisiones contractuales. Reimberg señaló que tienen indicios sobre los responsables de estas amenazas.
El miércoles 26 de febrero, militares y policías del Bloque de Seguridad llevaron a cabo una intervención en el subterráneo del hospital. Esta acción forma parte de una nueva estrategia de seguridad impulsada tras la visita de los ministros de Defensa, Gian Carlo Loffredo, y del Interior, John Reimberg, quienes inspeccionaron la bodega, la farmacia y otras áreas críticas del hospital para evaluar medidas de protección.
Desde entonces, las inspecciones han avanzado en zonas más complejas, como el subterráneo, donde se encuentran la planta de tratamiento de aguas servidas, una cisterna y diversos ductos que conectan con las farmacias y bodegas del hospital.
El comandante de la Zona 8, Pablo Dávila, señaló que en estas inspecciones participan 40 efectivos de cinco unidades especializadas, entre ellas el Grupo de Intervención y Rescate (GIR) y el Grupo Especial Móvil Antinarcóticos (GEMA). Destacó que la infraestructura presenta serias deficiencias y riesgos, lo que ha requerido el uso de equipos de protección especiales durante las inspecciones. Asimismo, anunció que la vigilancia en los exteriores del hospital será permanente para garantizar la seguridad de los visitantes.
El incidente de mayor gravedad en este contexto fue el secuestro de Ronny Camba, director administrativo del hospital, quien desapareció el 31 de enero tras asistir a un evento deportivo en La Atarazana, al norte de Guayaquil.