EXPECTATIVAS 2025

Ya estamos prácticamente en la primera quincena de un año que se vislumbra como sumamente movido. Sostengo que el 2025 será un año en el que las cosas sucederán de manera acelerada, tanto en el ámbito internacional como en el nacional. En el caso de Estados Unidos, lo primero que llama la atención es la inminente posesión del nuevo presidente, que genera una gran expectativa debido a los anuncios realizados en semanas anteriores. Tal vez el principal de ellos es la intención de imponer aranceles de alrededor del 25 % a los productos que ingresen al país. Esto marcaría el inicio de una etapa de proteccionismo en el comercio internacional estadounidense, alejándose del modelo de libre comercio y adoptando un enfoque en este sentido. Este giro tiene consecuencias globales, en la Unión Europea por ejemplo, anticipando esta postura proteccionista, se apresuraron a firmar el cierre de negociaciones con el Mercosur. Con este acuerdo, buscan consolidar un mercado conjunto de más de 700 millones de personas, una estrategia clave ante los posibles impactos de las nuevas políticas comerciales estadounidenses y los retos derivados de la competencia con China. Uno de los mayores desafíos de este año será lograr la firma y ratificación precisamente de ese acuerdo en los respectivos escenarios legislativos, tanto en Europa como en los países miembros de América del Sur. Por otro lado, China continúa con su política expansionista, trasladando plantas y fábricas a países donde las normativas arancelarias representan barreras significativas. Ejemplos de ello son España y otros países de la Unión Europea, donde han instalado fábricas de baterías, vehículos eléctricos y tecnologías avanzadas relacionadas con la sostenibilidad. Todo esto ocurre en un contexto internacional dinámico, pero también marcado por los impactos de conflictos como la guerra en Ucrania, la situación en Gaza y el papel de Rusia en el escenario global. En el caso de Ecuador, los desafíos internos también son significativos: las elecciones de febrero presentarán dos posibles escenarios; la reelección, que podría implicar la continuidad de políticas económicas alineadas con el Fondo Monetario Internacional, o un cambio de gobierno que podría adoptar un enfoque económico completamente distinto. Además, se están negociando acuerdos comerciales importantes, como el de Canadá, que ya ha avanzado a su quinta ronda, y el de Corea del Sur, donde se discute el cierre de un potencial acuerdo tras la firma de un documento preliminar. Ambos representan mercados estratégicos para una economía exportadora como la ecuatoriana. En este panorama, también debemos atender desafíos críticos como la necesidad de invertir en infraestructura para mitigar los efectos del cambio climático. Prepararnos para estos retos implica destinar recursos específicos y establecer políticas claras. Además, persisten problemas de inseguridad que exigen atención prioritaria. A pesar de todo, comenzamos esta primera quincena de enero con optimismo y determinación, enfocados en visibilizar y abordar los grandes temas que marcarán el 2025. EXPECTATIVAS 2025 QUE NADA PASE POR DEBAJO DE LA MESA