Productores, comerciantes y consumidores dicen que la sequía ha afectado este año a la producción de cítricos. La falta de lluvias tiene un impacto significativo en la producción de naranjas, toronjas y mandarinas, frutos muy sensibles a la falta de agua. Durante períodos prolongados en los que no llueve, los cultivos de cítricos pueden experimentar estrés hídrico.
Esto afecta su crecimiento, la formación de frutos y la calidad de los mismos, provocando también la caída de la flor de la planta. En Chone, Juan Verduga, comerciante de frutas, indicó que la baja producción de cítricos se debe a la falta de lluvias en las zonas donde se producen.
“No podemos tener otra explicación, ni en la Sierra que siempre llueve hay lluvias, imagínese acá en la Costa. Por ahora tenemos que esperar a ver qué ocurre en la etapa invernal para ver si la producción mejora”, manifestó el vendedor. Mario Caicedo, quien lleva más de 50 años comercializando naranjas, mandarinas y toronjas, señaló que ante la ausencia de estos productos han optado por dar a los consumidores otra variedad de frutas como melón, piña, sandía y maracuyá.
“Muchos clientes nos reclaman por la falta de naranjas, mandarinas, (cítricos) que son lo que más consumen. Pero siempre les explicamos que no depende de nosotros”, relata. Comentó que a veces llegan naranjas desde Colombia, pero por el precio que es alto muchas veces no dejan para vender.
“El ciento lo suelen vender en 16 dólares y toca vender al público 4 o 5 naranjas por un dolar, algo que al cliente no le gusta”, indicó Caicedo. En Portoviejo, por ejemplo, Luis Olguín contó que ha pagado por diez naranjas un dólar. Agregó que en época de buena producción recibía hasta 30 de estos cítricos por el mismo valor. “La poca producción que hemos tenido ha salido con muy mala calidad, han salido más amargas, no tienen jugosidad. Seguramente el suelo no está aportando el mineral que requieren, los resultados están a la vista, no hay producción”, dijo el productor Wilson Cedeño. Para el ambientalista Boris Zambrano, la baja producción de cítricos no se debe únicamente a la ausencia de lluvias, constantes el año anterior.
Explicó que las plantaciones no recibieron el agua necesaria para su producción, que sería de tres meses de forma normal. Indicó también que como factor principal, en muchas zonas las plantaciones no han sido renovadas por años. “Es importante también que los productores hagan estudios de suelo para identificar los componentes que estarían faltando a las plantaciones”, mencionó Zambrano. Mientras eso sucede, los cítricos se encuentran poco y con alto precio en los mercados.