La llegada de la temporada de mango en Manabí pinta el paisaje y las mesas de los hogares con el color y el sabor único de esta deliciosa fruta. Desde los mercados hasta los patios de las casas, los mangos frescos se vuelven protagonistas de esta época, ofreciendo una variedad de opciones, desde los mangos verdes y crujientes para disfrutar con sal y limón, hasta los maduros y dulces que se deshacen en la boca. Para los manabitas, el mango es más que una fruta; es un símbolo de tradición y alegría que une a familias y amigos.
Cada mordida es un recordatorio de los sabores de la región y de la generosidad de su tierra fértil. Los vendedores en los mercados de Manabí ofrecen pilas de mangos de diferentes variedades, mientras que el aroma de esta fruta fresca inunda los puestos. La temporada de mango también trae consigo una oportunidad para la economía local, ya que los agricultores de la región aprovechan la cosecha para vender y compartir los frutos de su trabajo. Sin duda, disfrutar de un mango en esta temporada es probar un pedacito de Manabí y de su riqueza natural.