Ante los apagones y cortes de electricidad que afectan diversas regiones de Ecuador, los docentes de instituciones educativas han adoptado una nueva estrategia para asegurar la continuidad del aprendizaje. Las tareas escolares, ahora, no requerirán internet ni electricidad, adaptándose a la situación actual del país y promoviendo actividades que los estudiantes puedan realizar con recursos disponibles en casa.
La iniciativa propone tareas de corta duración y con un enfoque significativo, con el objetivo de que los alumnos desarrollen habilidades de reflexión, creatividad y pensamiento crítico sin depender de la tecnología. Además, estas actividades están pensadas para fomentar el diálogo y la interacción en familia, reforzando la enseñanza a través de temas de conversación, juegos de mesa, lectura y otros recursos accesibles en el hogar.
