La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), una rama de la Organización Mundial de la Salud (OMS), clasificó el talco como “probablemente cancerígeno para los humanos”. Este mineral, ampliamente utilizado en cosméticos y productos para bebés. Un análisis realizado por expertos de la IARC, que será publicado en la revista The Lancet Oncology el próximo año, reveló una posible relación entre el uso de polvos de talco en la región perineal (pubis y ano) y un aumento en los casos de cáncer de ovarios. Numerosos estudios epidemiológicos revisados por la agencia sugieren que el uso de talco en estas áreas puede contribuir al desarrollo de esta enfermedad.
El talco es un mineral compuesto principalmente de silicato de magnesio y se ha utilizado durante décadas en productos para el cuidado personal debido a sus propiedades absorbentes y suavizantes. Sin embargo, la preocupación sobre su seguridad aumentó, dado que algunos productos de talco encontraron trazas de asbesto, una sustancia conocida por ser altamente cancerígena. El impacto en la industria de cosméticos y cuidado personal La clasificación del talco como “probablemente cancerígeno” por la IARC podría tener implicaciones significativas para la industria de cosméticos y productos para bebés.
Grandes marcas que producen polvos de talco y otros productos de cuidado personal podrían enfrentar un aumento en la presión regulatoria y posibles demandas legales. Las empresas podrían necesitar revisar sus formulaciones y considerar alternativas más seguras para evitar el uso de talco en sus productos. Además, los consumidores pueden cambiar sus hábitos de compra, y buscar productos libres de talco y preferir aquellos que utilicen ingredientes considerados más seguros.
