Dr. Juan Carlos Cassinelli Cali
Ex Ministro de Comercio Exterior, Doctor en Jurisprudencia, Director de Global Trade Consulting. Presidente del Comité de Comercio de Inversiones amcham GYE
Twitter: @JCCassinelli juancarlos@cassinelliabogados.com
Tengo la impresión de que, a medida que sigo viendo noticias del país, en Ecuador no tenemos realmente un debate estructurado y profundo en el que analicemos los problemas principales y sus posibles soluciones. Estos problemas incluyen la inseguridad, salud, educación, catástrofes naturales, política exterior, justicia, corrupción, etc. Sin embargo, enfocamos estos temas desde la deslegitimación de las personas y no de manera objetiva, que es lo que deberíamos hacer como país para superarlos. Lo que empiezo a observar es que, desde afuera, comienzan a hacer análisis de lo que sucede en Ecuador e incluso a proponer soluciones que parecen evidentes. Un ejemplo de esto es el Acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que nos proveerá en los próximos meses y años con casi 4,000 millones de dólares. El FMI señala la deuda de la salud como un gran problema que Ecuador debe comprometerse a resolver y también menciona que debe solucionarse el tema de los prestadores del IESS. Para que se tenga una idea, desde afuera se observa con preocupación esto y se ha puesto un plazo para que la propuesta esté lista hasta octubre de este año. Al seguir revisando, me doy cuenta de que el Banco Mundial hace precisiones en un informe sobre temas fundamentales para sacar adelante al país. Sorpresivamente, destacan el turismo, la agricultura y, por supuesto, la minería como ejes potenciales de desarrollo. Sin embargo, aunque estos temas se señalen desde el exterior, aquí adentro no estamos discutiendo sobre ellos ni sobre cómo superarlos. El FMI también publicó otro informe adicional en el que señala tres factores de riesgo fundamentales para Ecuador: primero, la inseguridad y su desenlace; segundo, la falta de acuerdos políticos; y tercero, la falta de inversión en los sectores estratégicos, especialmente en el sector petrolero. Como se puede ver, tanto el FMI como el Banco Mundial ofrecen diagnósticos, análisis y hasta sugerencias de solución que son evidentes y que deben implementarse en el país. Debemos resolver el problema de la minería ilegal y buscar inversiones mineras respaldadas con seguridad jurídica y cuidado del medio ambiente. Tenemos miles de millones en inversiones potenciales en minería que no podemos desperdiciar ni esperar un día más. En el tema agrícola, necesitamos el apoyo de la Banca Pública, BanEcuador y la Corporación Financiera, ya sea a través de financiamiento directo o indirecto, para impulsar el desarrollo agrícola. En el sector turístico, debemos ofrecer incentivos y beneficios para que pueda sobrevivir en esta etapa de inseguridad. Hay soluciones planteadas; aunque la parte de los acuerdos políticos es más complicada, todos debemos aunar esfuerzos desde los sectores público y privado, no para seguir las recetas del FMI, sino para discutir internamente cuáles son nuestros problemas y enfocarnos en las soluciones.”