señaló la ONU, en un comunicado publicado este 8 de noviembre. De acuerdo a la última actualización de la Organización Meteorológica Mundial, aquello influirá en el aumento adicional de las temperaturas tanto en tierra como en el océano.
A mediados de octubre de 2023, se observó que las temperaturas de la superficie del mar y otros indicadores atmosféricos (como olas de calor, inundaciones y sequías) y oceánicos en el Pacífico tropical central y oriental concordaban con las condiciones propias de El Niño, indica el boletín. Este fenómeno se desarrolló de forma rápida durante los meses de julio y agosto, alcanzando una intensidad moderada en septiembre de 2023.
Es probable que alcance su punto máximo entre noviembre de este año y enero de 2024. De acuerdo con los patrones históricos y las proyecciones a largo plazo actuales, se espera que El Niño disminuya gradualmente a lo largo de la próxima primavera, es decir, desde septiembre.