basura y canales de aguas lluvias.
Según un estudio realizado por investigadores de la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), se espera un aumento en los casos de dengue, leptospirosis y mordeduras de serpientes en Ecuador como consecuencia del fenómeno de El Niño.
Estas enfermedades, algunas de origen zoonótico, podrían propagarse debido a los impactos del evento climático. Una enfermedad zoonótica es una enfermedad que puede transmitirse entre animales y seres humanos. Andrea Orellana, coautora de la investigación titulada “El fenómeno de El Niño y sus impactos”, advierte que el incremento en los casos de estas enfermedades es una preocupación para la salud pública en el país.
Orellana, quien es investigadora de la Espol, destaca que el fenómeno de El Niño puede agravar la situación al aislar a poblaciones y generar escasez de agua potable, lo que podría derivar en la propagación de otras enfermedades, como el cólera. El Ministerio de Salud ya ha registrado un aumento en los contagios. Durante el año 2022, se reportaron 62 casos de leptospirosis en el país, mientras que en lo que va del 2023, la cifra ha aumentado a 406, siendo la provincia de Guayas la más afectada con 211 casos.
En cuanto al dengue, se registraron 11900 casos en el año 2022, mientras que en lo que llevamos del 2023, ya se han reportado 9 300 casos. La provincia de Manabí concentra la mayoría de los casos, con un total de 2422. En relación a las mordeduras de serpientes, en el año 2022 hubo 1300 afectados, mientras que este año ya se han registrado 731 casos. Nuevamente, la provincia de Manabí lidera la lista con 115 casos.
Es importante destacar que el fenómeno de El Niño ha tenido consecuencias graves en Ecuador en el pasado. Según un informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), durante el evento de El Niño en 1997-1998, se registraron 208 fallecidos en el país debido a inundaciones, deslaves y enfermedades.
Ante este panorama, se hace necesario fortalecer las medidas de prevención y control de estas enfermedades, así como mejorar la capacidad de respuesta de los servicios de salud para hacer frente a un posible aumento en los casos.
