MILU

Miluska Márquez, a quien cariñosamente conocemos como “Milu”, es una nereida moderna nacida en esta costa valiente. Una mujer que representa con fuerza la esencia de Manta: una ciudad que se levanta, crece y transforma cada desafío en una oportunidad. Milu no nació en el mundo del deporte. Pero como tantos mantenses, se forjó a través de la disciplina, la fe y el trabajo constante. Su historia es la de muchas personas que comienzan desde cero, pero con un propósito claro y una meta firme en el corazón. Ella demuestra que cuando se tiene convicción, nada es imposible, ni siquiera los retos más duros de la competencia deportiva. A inicios de este año, Milu compitió en el Ironman 70.3 Panamá 2025, donde alcanzó el segundo lugar en su categoría. Este resultado la convirtió en la primera mujer mantense de la historia en clasificar a un Mundial de Ironman 70.3, asegurando su participación en el LOCALES Manta, Jueves 24 de Julio 2025 3 Fritz Feijoo Ironman 70.3 World Championship 2025 en Marbella, España. Este ha sido su primer gran paso hacia el escenario internacional, y un reflejo de lo que sucede cuando la determinación se encuentra con la preparación. Sin embargo, su historia no termina allí. Hoy, Miluska vuelve a hacer historia al ganar el primer lugar de su categoría en el Ironman Ecuador, dejando su huella en casa, en su ciudad natal: Manta. Con este logro, se convierte en la primera mantense de su categoría en alcanzar un primer lugar en su propia ciudad. Esto es un triunfo que no solo habla de su capacidad atlética, sino también de su compromiso con su gente, con sus raíces, con su tierra. Además, Manta, como primera sede clasificatoria a nivel mundial para el Ironman 2026 en Niza, Francia, fue también el escenario donde Milu obtuvo su segundo cupo mundialista. Así, la ciudad y la atleta avanzan juntas hacia la escena global, llevando en alto el nombre del Ecuador y de su gente. Pero esto va más allá de los podios. Ironman no es solo una competencia; es un escenario de historias humanas. De sueños, de caídas, de volver a intentarlo. De amor propio y segundas oportunidades. Y Milu es una de esas historias que nos recuerdan lo que realmente importa: la capacidad de nunca rendirse. Este mensaje no busca hablar de una atleta. Busca tocar corazones. Invitar a las mujeres, hombres, niños y niñas de esta ciudad a creer en lo imposible. A ver en Milu un espejo donde se reflejen los valores que construyen el éxito de un hogar, una empresa y una sociedad: la constancia, la disciplina y la pasión. Milu no es simplemente una atleta, es una historia viva del alma de esta ciudad. Y hoy, Manta la celebra como símbolo de lo que todos podemos lograr si decidimos creer en nosotros mismos.