Las lluvias intensas, acompañadas de tormentas eléctricas, ráfagas de viento y granizo, han causado estragos en varias regiones de Francia durante los últimos días.
El fenómeno, descrito por autoridades meteorológicas como uno de los más severos del año, ha dejado daños materiales significativos, cortes de energía, inundaciones relámpago y ha activado múltiples alertas en todo el territorio nacional.
Météo-France reportó más de 30,000 rayos en un solo día, con la región de Eure acumulando más de 4,300 descargas eléctricas. En ciudades como Rouen se registraron ráfagas de viento de hasta 123 km/h, mientras que en Orly el granizo alcanzó los 85 mm, impactando cultivos, viviendas y vehículos.
Las inundaciones repentinas afectaron particularmente a zonas del centro y noroeste del país, con carreteras colapsadas, comunidades incomunicadas y casas invadidas por el agua.
En la región del Loira, un tornado categoría IF2 fue documentado en los municipios de Lérigneux y Roche-en-Forez, arrancando techos y derribando árboles