CORROMPIERON HASTA LAS MATEMÁTICAS
Las encuestas han perdido su valor. La herramienta de medición, que antes gozaba de alta credibilidad en medio de una campaña electoral, ahora es una herramienta de propaganda política. Hasta eso le arrebató a los ciudadanos el manoseo político. Es lamentable como unas simples fórmulas matemáticas fueron corrompidas por los políticos con tal de simular una realidad y ganar unos cuantos votos.¿Hasta dónde llega la miseria de los políticos y sus partidos? Hasta la desfachatez de manipular números para sostener sus discursos de que van primeros o segundos, o que están subiendo, cuando en realidad van en picada. Con el cuento de que es una fotografía de un momento determinado o una aproximación a la realidad, pueden vender una falsedad a un votante confundido y fácilmente manipulable.
¿No se supone que las matemáticas no mienten?El perverso juego electoral de los números debe parar en algún momento. El Consejo Nacional Electoral, que es muy bueno para armar reglamentos, pero pésimo para hacerlos respetar, debería de una vez asumir su rol de árbitro del proceso electoral y no de solo un mero organizador, y poner límites para que las encuestas regresen a ser lo que eran antes y ya no números manipulados a la conveniencia de un candidato. Ya no se puede creer en nadie. Ahora ni en las matemáticas.