“La inversión privada en Ecuador es necesaria para fortalecer el empleo, y no estamos en contra de ella”, enfatizó Jorge Cevallos, secretario general del Comité de Empresa de los Trabajadores de Petroecuador (Cetrapec), durante una reunión con la gerencia de Petroecuador en el Ministerio del Trabajo en Quito, el 25 de febrero.
Con estas declaraciones, Cevallos reafirmó el respaldo del sindicato a la posible concesión del campo Sacha, el más productivo del país, a un consorcio privado. Esta propuesta ha generado controversia y ha dividido a los trabajadores del sector petrolero.
Por otro lado, la Asociación Nacional de Trabajadores de las Empresas de la Energía y el Petróleo (Antep), que también agrupa a empleados de Petroecuador, presentó una acción de incumplimiento ante la Corte Constitucional, argumentando presuntas irregularidades en el proceso de concesión del campo ubicado en la provincia de Orellana.
Mientras tanto, los trabajadores favorables a la concesión, representados por Cetrapec, exigen que, en caso de concretarse la inversión privada, sus salarios sean equiparados a los estándares internacionales del sector petrolero. “Si llega la inversión privada al campo Sacha, los sueldos deben estar al nivel internacional, como los de un petrolero en otros países”, señaló Cevallos en una reunión previa a la negociación del próximo contrato colectivo entre Cetrapec y Petroecuador.
Negociación del contrato colectivo
Cetrapec y Petroecuador están próximos a iniciar conversaciones para revisar el contrato colectivo vigente desde 2017.
Uno de los puntos clave de la negociación es la remuneración variable de los trabajadores petroleros. Cevallos destacó que este beneficio está reconocido por la ley y es fruto del esfuerzo de miles de empleados, quienes lo destinan principalmente a atender su salud.
“Aquí no hay trabajadores privilegiados. No es un lujo ser enfermo, tener cáncer, problemas renales, cardíacos o de audición”, expresó Cevallos, aunque no precisó cuántos empleados padecen estas condiciones.