Este jueves, la Policía Federal de Brasil imputó a 37 personas, entre ellas el expresidente Jair Bolsonaro, en el marco de la investigación sobre un intento de golpe de Estado tras las elecciones presidenciales de 2022.
Según la Policía , Bolsonaro sabía de un plan del grupo conocido como los “niños negros” para desencadenar un golpe de Estado e impedir que el gobierno asumiera el poder en 2022. La investigación reveló que ellos habían planeado asesinar al presidente Lula da Silva y al vicepresidente Geraldo Alckmin el 15 de diciembre de 2022.
Todos ellos fueron acusados de los presuntos delitos de abolición violenta del Estado Democrático de Derecho, golpe de Estado y organización criminal.