Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya no considera a la COVID-19 una emergencia sanitaria mundial, las infecciones respiratorias continúan siendo un problema de salud pública en Ecuador.
Rosario Vargas, una ciudadana con una enfermedad crónica, representa a quienes siguen tomando precauciones, como el uso de mascarilla, especialmente en espacios cerrados y transporte público