SUICIDIOS EN QUITO, UN ENORME DRAMA
Un informe de la Policía Nacional pone en escena un tema trágico: en Quito, el número de muertes por suicidio supera a las que se producen por violencia. La cifra se refiere al año 2022 pero todo indica que la situación no va a mejorar. La Policía cree que el número de suicidios en 2023 puede ser superior al de 2022, puesto que entre enero y junio se han registrado 97 suicidios. Lo preocupante es que si bien existe un número importante de muertes por asesinato, 182, las que se producen por suicidio son alarmantes: 198. Este fenómeno prende las alarmas sobre el estado de la salud mental y el estado emocional de los quiteños. El informe señala que casi las dos terceras partes de los suicidios tienen relación con problemas familiares, dejando a los problemas económicos, a las enfermedades terminales y a los problemas escolares en cifras sustancialmente más bajas.
Aunque un importante número de suicidios se producen en los puentes, la mayor parte ocurre en los domicilios. Este fenómeno apunta a un tema que es menos rentable políticamente que la inseguridad: los políticos venden fórmulas para solucionar el problema de la delincuencia pero no reflexionan sobre este drama. Es de esperar que quienes elaboran políticas públicas lo coloquen entre sus prioridades.