El presidente estadounidense, Joe Biden, se reunió en San Francisco con la viuda y la hija del fallecido opositor ruso, Alexei Navalny, cuya muerte ha provocado que cientos de rusos se congreguen en vigilias improvisadas, mientras Estados Unidos y otros países señalan al Kremlin como responsable.
Asimismo, aprovechó para explicar a la viuda del opositor, que como la Casa Blanca anunció que Estados Unidos tiene previsto anunciar mañana un importante paquete de sanciones sobre Rusia en respuesta a la muerte de Navalny, la represión de las autoridades rusas y la brutal e ilegal guerra en Ucrania.
La Casa Blanca no ha querido precisar hasta ahora qué sanciones específicamente impondrá Estados Unidos sobre Rusia, país que ha sido objeto de numerosas restricciones económicas tanto por parte de Washington como de la Unión Europea (UE) desde que iniciara la invasión de Ucrania hace casi dos años.
El Gobierno de Biden ha impuesto varias sanciones contra Rusia, incluidas acciones para aislar a los oligarcas cercanos a Putin, sanciones contra el sector energético y la exclusión de bancos rusos del sistema de comunicación interbancario internacional, SWIFT, lo que ha aislado aún más a la economía rusa del sistema financiero internacional. La viuda de Navalny culpa directamente a Putin de ordenar el asesinato de su principal oponente político.