En ocho puertos marítimos de Guayaquil, uno de Esmeraldas y otro en Manta se incrementó la presencia militar con fusiles. Luego del Decreto 111 en el que el presidente Daniel Noboa establece la existencia de un conflicto armado interno, el sistema portuario de Ecuador subió a nivel dos la alerta de seguridad, para evitar actos terroristas.
El director nacional de Espacios Acuáticos, Ricardo Unda, señaló que “fase uno es normal desenvolvimiento de las actividades. Con el decreto ejecutivo 111 elevamos el nivel de seguridad al dos, y esperamos no llegar al tres, porque eso sería parar las actividades portuarias y afectaría la economía del país”.
No es una militarización sino la presencia de uniformados en seis turnos, en las puertas para identificar si alguien quiere ingresar explosivos o cocaína. El despliegue también es al interior, sobretodo en las horas con mayor movimiento de contenedores. La acción complementa los operativos antinarcóticos de la Policía. “Adicional hacemos como bloque seguridad, Fuerzas Armadas y Policía Nacional la actividad de determinar dónde se contaminan los contenedores”, mencionó Unda.
En el mar también se ha reforzado la seguridad militar, los controles, permitieron la incautación de una tonelada y media de droga, a 200 millas del puerto de Manta. La medida durará hasta la primera semana de marzo, fecha en la que concluye el estado de excepción. Luego de ese tiempo se analiza, con las autoridades de cada terminal, el uso de drones en los patios de contenedores, donde los narcos ingresan la droga.
